El cambio climático, los cambios en el uso de la tierra, las actividades recreativas y el comercio de animales infectados podrían hacer que esta enfermedad mortal sea más común.
La fiebre hemorrágica de Crimea-Congo está causada por un virus, que se transmite principalmente por la picadura de una garrapata. Aunque menos común también puede transmitirse de persona a persona a través de fluidos o sangre.
En octubre de 2008, un carnicero de 60 años ingresó en un hospital rural de Al-fulah, en el sur de Sudán, con fiebre alta, escalofríos y dolor de cabeza. En los dos días siguientes, desarrolló diarrea, empezó a sangrar por la nariz y a vomitar sangre. A los cinco días de caer enfermo, murió.
El hospital no disponía de guantes de protección ni de productos antisépticos y, seis días después del ingreso del carnicero, un enfermero que le había atendido desarrolló los síntomas, seguido por el enfermero jefe. Se infectaron unas personas y al menos seis murieron (no había registros disponibles de tres de los pacientes). Los análisis apuntaron a la fiebre hemorrágica de Crimea-Congo (FHCC) como culpable.
Este brote es uno de los numerosos brotes pequeños de FHCC que se han producido en los últimos años. El virus que la transmite está clasificado como patógeno de nivel de bioseguridad 4, lo que significa que causa infecciones frecuentemente mortales en los seres humanos y que no existe un tratamiento eficaz para ello. Tasa de letalidad: 10-40%
¿Por qué la fiebre hemorrágica de Crimea-Congo puede ser la nueva pandemia mundial?
Amenaza de pandemia empieza a preocupar ya que la amplia difusión geográfica de las garrapatas Hyalommamarginatum que portan el virus de la FHCC, y su persistente circulación, significa que el riesgo de contagio de los animales a los humanos es alto. Factores como el cambio climático y el movimiento de ganado o animales salvajes pueden aumentar aún más su propagación geográfica, ya que el virus ha ampliado recientemente su alcance desde la región de los Balcanes hasta Europa Central y Occidental.
Datos sobre la fiebre hemorrágica de Crimea-Congo
Periodo de incubación: Los síntomas suelen aparecer entre cinco y seis días después del contacto con sangre o tejidos infectados, hasta un máximo de 13 días.
Síntomas: Suelen ser de aparición repentina e incluyen dolor de cabeza, fiebre alta, vómitos y dolor de espalda, articulaciones o estómago. A medida que la enfermedad avanza, las personas tienden a desarrollar grandes áreas de hematomas severos, fuertes hemorragias nasales y hemorragias incontroladas en los puntos de inyección.
Diagnóstico: Pueden utilizarse varias pruebas de laboratorio para diagnosticar la FHCC, pero una combinación de detección de antígenos virales (captura de antígenos por ELISA), secuenciación del ARN viral (PCR de transcriptasa inversa) y aislamiento del virus a partir de la sangre o los tejidos de los pacientes es más eficaz durante los primeros días de la infección. Los anticuerpos contra el virus pueden detectarse más tarde, o en la sangre de los supervivientes de la FHCC.